El Maestro Escribe su Historia
En el universo de la educación pública colombiana, donde el aula se convierte día a día en un escenario de desafíos y esperanza, emergen docentes que transforman su práctica pedagógica en huella; son maestros que no solo enseñan, sino que también construyen conocimiento aportando al país y, sobre todo, escriben su propia historia. Uno de ellos es el profesor Gustavo Adolfo Cuello Rangel, un ejemplo de que el magisterio no se limita a dictar clases sino también investiga, crea y deja legado.
Licenciado en Física y Matemática de la Universidad del Atlántico en 1980, el profesor Cuello Rangel ha consagrado su vida al servicio de la enseñanza. Desde 1996 hasta la actualidad se ha desempeñado como docente en la Institución Educativa El Carmelo, en San Juan del Cesar, La Guajira, contribuyendo de manera decisiva a la formación de generaciones de estudiantes. Con esfuerzo y dedicación elaboró los textos de física titulados La Física y el Mundo Natural 10 y La Física y el Mundo Natural 11 dirigidos a alumnos de educación media de todo el país. También fue reconocido a nivel nacional, destacándose en 2015 con el galardón de Excelencia Docente otorgado por el Ministerio de Educación Nacional, un testimonio de su impacto y la trayectoria pedagógica.
Los textos que hoy protagonizan su legado son una propuesta didáctica innovadora en el ámbito de la física, en ellos, se encuentran plasmados de forma progresiva cada tema con su introducción, explicación conceptual, ejemplos y ejercicios prácticos; además los libros cuentan con un glosario de términos en inglés de uso frecuente en la disciplina, reseñas de científicos destacados, guías de laboratorio esenciales y un apéndice con demostraciones claves para comprender los fundamentos físicos. De igual manera estas obras contienen una sección con preguntas tipo Saber 11, contribuyendo de manera directa a la preparación de los estudiantes para las evaluaciones de competencias en ciencias naturales.
El trabajo realizado como docente no solo evidencia su compromiso genuino con la calidad educativa, sino también con el deseo de aportar a la formación de ciudadanos críticos, analíticos y curiosos.
Este caso representa a tantos maestros que, sin ostentar el título de investigadores científicos o doctores en educación, convierten la experiencia del aula en conocimiento transformador, son docentes que perfeccionan los contenidos de su asignatura y crean materiales didáctico-pedagógicos que explican con claridad, precisión y sentido práctico aquello que enseñan, permitiendo a los estudiantes comprender realmente lo que aprenden desde cada contexto, porque cuando la experiencia se convierte en pedagogía, el maestro lo demuestra con su ejemplo: saber qué hacer, cómo hacerlo y cuándo hacerlo.
Porque cuando un maestro crea, innova y se atreve a dejar marca, su legado traspasa las paredes del aula y se convierte en un patrimonio colectivo del sistema educativo colombiano.